Para comprender cómo queda la economía en el “después de Chávez”, conversamos con una de las voces más autorizadas y objetivas en la materia: el economista Mata Mollejas. Su apreciación es sombría.
Por AÍDA GUTIÉRREZ H. (@guti21)
Consultamos al Presidente de la Academia Nacional de Ciencias Económicas y Coordinador del Doctorado de Economía de Faces de la Universidad Central de Venezuela, economista Luis Mata Mollejas, sobre el efecto que tuvo la administración de Hugo Chávez en la economía venezolana y en qué estado la ha dejado tras su muerte.
-Cuando terminas con un dólar que vale más de 20 bolívares en el mercado paralelo en comparación con el oficial, que pasó de 4 a 6, una devaluación del 46% dice la gente, la economía está absolutamente dislocada, -precisa Mata.
-Las cifras que maneja el gobierno donde dice que en 2012 la economía creció al 5,6% es desde el punto de vista de la demanda, porque los economistas miden el ingreso y el gasto, en cambio ellos miran el gasto y no la producción, entonces el gasto creció al 5,6% pero no la producción.
-Esa imagen de un país en progreso no es verdad, porque el progreso se mide por la producción. Es una cifra “medio mentirosa medio verdadera” porque se da con la intención de decir que se está creciendo pero lo que está creciendo es el gasto.
-Eso es absolutamente –añade- coherente con un bolívar que se deprecia, lo cual contradice las cifras oficiales.
El académico indica también que dicha gestión estuvo colmada de errores “que ha llevado a tener una de las inflaciones más altas del mundo, un sub-empleo de casi el 50% y una infraestructura territorial al borde del colapso”.
Igualmente destaca que “la situación fiscal venezolana es insostenible, al límite de la insolvencia”.
-¿En que estado deja la economía Chávez luego de su muerte?
-En un estado dislocado, muy mal, porque es una economía que si hace 14 años tenía problemas ahora los problemas son el triple de gordo, -asegura Mata.
El riesgo país
A juicio de Mata Mollejas, el gobierno de Chávez se embarcó en mecanismos especulativos que legalizan la fuga de capitales y hacen poca atractiva la inversión reproductiva en el país. “Es decir, estimula prácticas financieras que van en contra de los mejores intereses económicos nacionales: aumentar la producción y el empleo local”.
-La consecuencia, no deseada, es desmejorar los indicadores de comportamiento económico que se incluyen al considerar el índice denominado “riesgo país” y que sirven de referencia a los eventuales prestamistas internacionales para evaluar la capacidad futura de pagos. No es entonces de extrañar el altísimo nivel de riesgo-país asignado a Venezuela, a pesar de las potencialidades de exportación petrolera; lo cual deriva en las elevadas tasas de interés (10%) que se pagan por los bonos venezolanos; ya estén a cargo de la República o de PDVSA.
-Así, más pronto que tarde, el Fisco se verá obligado a aumentar los impuestos, a reducir los gastos y a efectuar una devaluación formal y abierta, como solución parcial y de emergencia, mientras se instrumente una solución de largo aliento asociado con el mayor desarrollo del país… Es decir, el nuevo gobierno estaría en la obligación de cambiar la estrategia fiscal y financiera seguida en los últimos 15 años.
-Debiendo decirse que la re-estructuración de los gastos es ya imprescindible; pues los destinados al apoyo de la producción nacional no llegan al 10% del total del presupuesto aprobado para el 2013 y que el servicio de la deuda, que no podrá reducirse, es superior al gasto por situado constitucional destinado a las regiones, entre otras perlas, contrarias al desarrollo económico.
“Han desperdiciado los recursos”
Considera el economista, que el gobierno a malgastado la renta proveniente del petróleo en gran parte en propósitos políticos de corto plazo, por ejemplo en ayuda a los países hermanos. “Eso no está bien y menos hacerlo sostenido, el resultado es inflación y quiebra porque han desperdiciado los recursos”.
-En sentido general, un país tiene que usar sus rentas inciertas en gastos de inversión. Por ejemplo: invertir en fábricas para que la gente trabaje y no pase hambre; también en bajar la delincuencia. Nuestra delincuencia es muy alta y el gobierno gasta en las Misiones por ejemplo, regalando pescado y recordemos la lección: no le regales pescado sino enséñalos a pescar.
-La guerra interna que nos tiene la delincuencia es producto del desempleo. Recuerde lo que dijo el presidente una vez, sino tengo comida para mis hijos saldría a robar, allí le dio luz verde a todos. Y no es mejor por ejemplo, rellenar los huecos de las carreteras y darle trabajo a la gente que está pasando hambre.
-El gobierno ha hecho todo lo contrario que debería ser un gobierno inteligente, en vez de generar empleo los ha destruido y los pocos que ha creado no tienen el efecto multiplicador.
-Toda la ganancia se va al exterior. Cuando el gobierno gasta hoy en pan, con una renta que depende de la compra futura, él está equivocado en el propósito general de su política.
Mata Mollejas advierte que el consumo o gratificación instantánea, “que se cancela con rentas futuras inciertas o derivadas de transferencias y no del trabajo nacional, tienden a producir inflación, estancamiento y decadencia, como en los casos históricos de la Roma y de la España imperiales”
A su criterio, la situación económica de Venezuela es muy grave, pues el desempleo y el alto volumen de ocupación informal (43%) está acompañado por la mayor inflación del continente americano (19,4%).
Considera que “los peores resultados ocurren cuando los intereses políticos, asociados a los negociados con la estabilidad cambiaria, se sobreponen a los requerimientos de ajustes en la economía material; error en que cayeron Churchill en 1920, la Argentina de Cavallo en 1991 y la política de Chávez desde 2003”.
Endeudamiento público
Explica el académico que “la destrucción por razones políticas del aparato productivo interno, tanto el petrolero como el no petrolero, provocó un endeudamiento público consolidado (PDVSA y fisco) del 56% (según Ecoanalítica) por la aparición y persistencia del déficit en cuenta corriente , originado en la merma del orden del 40% del ingreso corriente en divisas, al aplicarse criterios de favoritismos políticos en la política comercial de PDVSA; lo cual merma la disponibilidad de divisas (iliquidez) ocultada por la revalorización del oro en las Reservas Internacionales y por los prestamos chinos”.
-El saldo objetivo –continua- de las Reservas Internacionales para finales del segundo semestre de 2012 arroja unos US$ 20.000 millones de dólares y al deducir el componente de oro (70%) quedan operativas o liquidas unos US$ 6.000 millones.
-Si se estiman las importaciones necesarias en 30.000 millones, las reservas operativas son 1/5; es decir dos meses. Y al considerar la estrechez del flujo de ingresos de divisas y la ampliación del de salida, al considerar los pagos financieros, la amenaza de iliquidez es real.
Reitera el experto que la gestión de Hugo Chávez deja a su muerte una economía dislocada y por tanto una situación muy grave, difícil para el próximo gobierno… (@guti21)
FUENTE: Revista Zeta Nº1893 – 08-03-13