El economista Luis Mata Mollejas, habla del negocio petrolero de Venezuela, según las graves circunstancias político-económicas que atraviesa el país.
Por AÍDA GUTIÉRREZ H. / @guti21
Luis Mata Mollejas en entrevista exclusiva para Zeta , analiza el panorama petrolero nacional e internacional, desde la producción hasta el consumo. Precisa que “la proporción de las exportaciones venezolanas del comercio mundial en 1970 fue del 13.3%, en contra del 6.0% en 2016; exportaciones que en la práctica reducen los ingresos en divisas en 50%”.
Señala el economista que en los distintos períodos, “se ha dado un incremento anual del consumo y producción de 1 millón de barriles/días entre 1970 y el año 2000; de un poco menos de 1M b/d entre el año 2000 y el 2016, tomando en cuenta la crisis global político-económica iniciada en el 2008, que todavía no concluye y la sustitución por fuentes alternativas.”
-Por eso, -continúa Mata- la estimación de un consumo y producción mundial de 96 M b/d para el 2016 es optimista; mientras que otro con crecimiento mínimo sería de 92 M b/d. En ambos casos la distribución regional a grosso modo, señala que 2/3 de la exportación provendría del Oriente Medio y que aproximadamente un 1/3 tendría un origen compartido entre África y Latinoamérica.
-Esto se corresponde con una caída sostenida de la proporción latinoamericana; que en el caso venezolano conlleva una caída relativa del 50%. En efecto, la proporción de las exportaciones venezolanas del comercio mundial en 1970 fue del 13.3%, en contra del 6.0% en 2016; exportaciones que en la práctica reducen los ingresos en divisas en otro 50%, por los convenios de financiamiento que se tienen con el Caribe y con China.
Las restricciones geopolíticas
El ex presidente de la Academia Nacional de Ciencias Económicas y Coordinador del Doctorado de Economía de la UCV, habla sobre las circunstancias coyunturales del negocio petrolero, lo que denomina “la tenaza dólar/petróleo”.
-El 17 de abril de 2016 el príncipe Muhammad Bin Salman, ministro de petróleo de Arabia Saudita, en ocasión de la reunión en Doha entre representantes de la OPEP y productores no OPEP declaró que un precio de “30$ b/d o 70$ b/d era lo mismo” para el reino saudí. Declaración que sería explicada el 25 de abril de 2016 cuando expuso la Visión sobre el negocio petrolero, para hacer al reino menos dependiente de la exportación de petróleo (o rentismo nacional) al introducirse en el mundo de otros negocios, teniendo como horizonte el 2030.
-La estrategia correspondiente –prosigue Mata- incluye la eliminación de muchos subsidios y el aumento de los impuestos; pero la medida inicial será la venta de un 5% del capital accionario de ARAMCO para proveer los fondos necesarios del plan, al crear un Fondo de Inversiones Públicas de $ 2 trillones, que sería el sustento de un conglomerado industrial. Este programa producirá un déficit en las finanzas públicas sauditas del orden del 13.5% en 2016.
-¿Cómo se explica esta acción dentro de un marco de precios reducidos?
-Un componente claro es mantener la decisión de no recortar las exportaciones para conseguir un eventual aumento de precios, salvo que Irán emprendiese una acción equivalente. Acción muy poco probable, pues Irán ha previsto realizar un programa de modernización económica, que depende del Banco Mundial y de capitales norteamericanos e ingleses, que a su vez depende del resultado de las elecciones norteamericanas de finales de 2016.
-Así, las estrategias competitivas entre Arabia Saudita e Irán, complementan los enfrentamientos geopolíticos mayores entre los Estados Unidos y la nueva Rusia, por la influencia en el Medio Oriente y de su proyección sobre las relaciones con China, como demandante de energéticos provenientes de los alrededores del Mar Caspio. Asuntos que, como sabemos, se complican al considerar los conflictos religiosos del área.
A su juicio, no es probable encontrar apoyo político para reducir la producción del Medio Oriente, para elevar los precios del petróleo en un corto plazo.
-Debiendo llamar la atención al respecto de lo que se ha denominado el “componente especulativo de los precios”, relacionados con las transacciones en los llamados mercados de futuros y spot; los cuales toman en consideración la creación de reservas en los países importadores y la oferta potencial de los exportadores.
-Debiendo destacar que los costos de producción de los energéticos alternativos, según los estudios del FMI presentados en diciembre de 2014, señalan un límite de $ 50 b/d para el precio de los petróleos obtenidos en las fuentes tradicionales; nivel que es absolutamente insuficiente para equilibrar las cuentas fiscales venezolanas al haberse reducido el volumen que producen los ingresos disponibles en divisas.
Restricciones geoeconómicas
Asegura Mata Mollejas, que las restricciones surgen del hecho de que los precios del petróleo se fijan en dólares estadounidenses, los cuales constituyen el patrón de referencias del Sistema Internacional de Pago.
-En efecto, al no tener que preocuparse el Banco de la Reserva Federal por acumular otras divisas, ni a la variación del tipo de cambio, para hacer frente a sus obligaciones internacionales, el objetivo de la política monetaria estadounidense atiende a los propósitos políticos domésticos: la variación de su situación interna de desempleo e inflación, con despreocupación por la marcha de la economía mundial.
-Este privilegio no se alteró ni con los convenios de pago al interior de la Unión Europea ni con la acumulación de reservas en dólares por otros países; pues todos deben acumular dólares para hacer frente a sus pagos internacionales.
-El conjunto de la banca central de la Unión Europea mantiene el 20% de sus activos en dólares; el Banco Central de China tiene el 50% de sus activos en dólares y Arabia Saudita debe mantener el 90% de sus activos en dólares. Así, los diversos países en función de su comercio internacional deben mantener dólares, para evitar la depreciación de su moneda, la inflación correspondiente, el alza de la tasa interna de interés correlativa y la reducción de la inversión reproductiva.
Balance para una Venezuela nueva
Destaca Mata, refiriéndose a Venezuela, que en el inicio del siglo XXI, la sociedad civil cedió a la tentación de prohijar un experimento político autoritario, sin percatase de la fragilidad económica y política.
-Las circunstancias internacionales permitieron obtener, por una década, recursos petroleros abundantes; pero la combinación de ello con un gobierno autoritario, reabrió la puerta al consumo para beneficio de quienes tenían ambiciones de mejoramiento socio-económico con mínimo esfuerzo.
-La corta visión gubernamental sobre los eventos internacionales no previó la caída de los precios del petróleo, por lo cual acentuó el endeudamiento fiscal; además de que la ideología gubernamental no solo suspendió la colaboración con el sector productivo privado sino que lo dislocó, culpando dicho sector de los males asociados a la esquizofrenia gubernamental.
-En consecuencia, invitamos a la sociedad política: gobierno y oposición, a recorrer el camino del trabajo y salir del camino del despilfarro bochinchero de los recursos petroleros, como se hace en la actualidad sobre la ilusa guachafita de encontrar aliados ideológicos, cuando la experiencia internacional ha demostrado, hasta la saciedad, que solo prevalecen la coincidencia de intereses y no las fantasías míticas, -enfatiza Mata. (@guti21)
FUENTE: Revista Zeta Nº2052 – 03-06-16